viernes, 2 de marzo de 2007

Aquí esperando... ¿tú?

Aquí me tienes como tu sonso…
Esperando ilusamente tu no ida,
curiosamente encuentro un libro perdido, aquí en la banca,
un lápiz mordido y un pedazo de goma de mascar,
todo eso para amenizar;
me dan las 6:00 y pienso, aunado a la falta de partida ya antes mencionada, en tu regreso inesperado, sí, con un bote de pintura rosa, una bufanda, una chamarra en el brazo, colgando por supuesto, y con la misma actitud de siempre, y de nunca, dada tu poli-polaridad, la sonrisa, la suave piel de tu ser, tu seudo indiferencia al verme…
Ya diéronme las 6:30, y aún aquí, dirían todos, en un contexto frío y medio vacío de cultura pero pretenciosa altivez; una cámara allá afuera, una fuente apagada, de pronto un silencio ameno, roto por un grito chillón y sin sentido por parte de una fémina desubicada; de los mosquitos ni su pbizzz, seguro salieron de antro, es viernes, y… ¿tú?
Ah! De pronto me entró la cordura, no estás, y no vendrás, ¿para qué?
Y… ¿yo? La conciencia, tengo cosas menos importantes que hacer que esperar por algo que no vendrá, al menos no hoy, y la verdad no sé si el lunes o el martes, o el mes que entra, o en un sueño en abril, tal vez en los quince de tu hermana, tal vez cuando te canses de jugar, por junio, tal vez me deba traer una buena taza de café y un delicioso baguette para esperar, mientras me hago a la idea que no vendrás, es decir, mientras la digiero…..
Puntos suspensivos eternos, misteriosos y caprichosos, ¿no crees?, nunca sabes cuando acaban ni que les sigue; mira, como nosotros, no tenemos ni la menor idea de que pasa, a dónde vamos, de que queremos con exactitud, y si acaso afirmamos lo contrario, puros cuernos; pretendemos entonces parecer más sapientes, hecho que de inmediato notamos, no se nos va una… y criticamos entre dientes…
Hablando de irse, me dieron ya las 7:00, si que se va el tiempo, ese wey es muy rápido, hasta ahora no conozco nadie que se atreva a batirlo en duelo a muerte, detalles de la vida…
…y sigue corriendo, mientras yo sigo resentido, por tu partida tan repentina, debido a tu falta de determinación o convicción, por nervios, conveniencia (que lo dudo), o quisquilleo provocado por razones intrínsecas a tus sentimientos, desconocidos claro, relativos…
Ya fui, ¿a dónde?, ni sé, pero no me hallo, ni contigo, ni conmigo, sólo por un fin, optimísticamente pensando, (grito)…
Creo que en serio no vas a venir, y aún así no sé cuánto tiempo más quiera esperar, con todo y mi taza de café… recuerda que el café es amargo, al igual que la ida… y la malvenida…
no lo sé…
-Molcast

1 comentario:

Ruta Magazine dijo...

Muuuy muuuy bien Moy, ese cuento si me gustó un chingo. De todo lo que leí tuyo, ha sido el mejor. Me agrada que le hayas metido mas trivialidades, más de tu personalidad. La lectura se me hizo bastante amena y pues obviamente entiendo el contexto y me da mucha risita jaja ^^.

No, neta está de huevos.

Axel.